Voy a escribir una obviedad. Estados Unidos es muy grande. Es tan grande que es capaz de lo mejor y de lo peor. Un país que es un conglomerado de personas de orígenes culturales, geográficos, étnicos e ideológicos completamente diferentes. Que exporta al mismo tiempo banalidades y elementos culturales muy interesantes. En el que viven racistas ignorantes armados hasta los dientes pertenecientes al Ku Klux Klan o intelectuales y artistas que pasarán a la historia. Esto pensaba cuando escuchaba a Bright Eyes, el grupo de folk-rock de Conor Obrest (Nebraska, 1980). Un tipo que me resulta brillante, consecuente y honesto.
Este aún joven catautor y guitarrista, es un artista en el amplio sentido de la palabra, que se ha creado una carrera por sí mismo y sin traicionar una actitud y unas ideas con las que muchos de los conciudadanos no están para nada de acuerdo. Como muestra, “When the President Talks to God” (”Cuando el presidente habla con Dios”), canción satírica acerca de George W.Bush, que se hizo famosa en EE.UU. cuando de gira con REM o Bruce Springsteen pidió el voto contra la reelección del por entonces presidente (2004).
Conor Obrest se subió a un escenario por primera vez con 13 años y produjo la primera maqueta en un casete con su hermano, con el que formó el embrión ya entonces de un sello independiente que ha conseguido tener cierto éxito; a los 15 ya formaba parte de una banda de algo más que adolescentes. Ha formado diferentes proyectos musicales que oscilaban entre el folk, el pop, el rock, la electrónica… Son palabras mayores relacionarlo con Leonard Cohen o Bob Dylan, pero al mismo tiempo un halago.
Bright Eyes se formó con el multiinstrumentista Mike Mogis en 1998 y esta banda, el proyecto más serio y permanente de Oberts, se labró una reputación muy poco a poco siempre en la escena independiente y denunciando el papel de las grandes compañías que controlan muchos medios de comunicación. Demostraron que con otras armas se puede llegar al gran público y llegaron al número 1 de la prestigiosa revista musical Billboard. De todos modos los temas de Obert y compañía son más existenciales y vitales que políticos como son los problemas del día a día desde el punto de vista de la soledad, la ansiedad por el futuro, la simple tristeza o los problemas con el alcohol. Personalmente no lo considero nada fácil de escuchar, de hecho, ninguna canción del último disco del grupo (“The People´s Key”, febrero 2011) ni siquiera se acerca en mi opinión a la calidad de la grandísima “Something Vague”.
Este tema está incluído en “Fevers and Mirrors” y lo incluímos en este blog por poco, puesto que data del año 2000. Con apenas 20 años, Obert cantaba sobre sueños que son pesadillas, sobre el tiempo vacío… incluído un crescendo musical y vocal tremendo que consigue trasmitir esa inquietud que la letra expresa.
Letra de "Something Vague" ("Algo Vago")
De vez en cuando, parece peor de lo que es
Pero ante todo el punto de vista es correcto
Ves tu aliento subir mientras subes las escaleras
hacia ese ataúd que llamas tu apartamento
Y te hundes en tu silla y quitas la nieve de tu pelo
Y bebes la fría distancia
Y no estás seguro de por qué haces esto
pero sabes que necesitas llenar los días
Unas horas más...
Tengo un sueño en mi cabeza que no se va a ir sólo
Está atrapado allí desde que vino hace noches
Y estoy sobre un puente en la ciudad en que viví
como un niño, con mi madre y mis hermanos
Y entonces el puente desaparece y me mantengo en el aire
sin nada sosteniéndome
como una estrella, un jodido brillo en la noche
para todos los ojos hambrientos de ver
Como lo que deseamos una vez
Bueno, ahora estoy confundido
¿Es esta muerte realmente tuya?
¿Y estos sueños significan algo?
No, yo creo que es más bien un fantasma
Que nos está persiguiendo a ambos
Algo vago, que no vemos
Más parecido a un sentimiento
que sad :'v esta cancion sin duda es de mis favoritas...
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